lunes, 30 de agosto de 2010

UNA INFUSION DE VERBO, CASCADA PRECIOSA, TITILANTES

UNA INFUSION DE VERBO

Me tiendo sobre él,
explayándome.
Junto mis manos a las suyas,
allí bordeándolo, frente a frente,
entreabiertos ojos con ojos,
mis labios contiguo a los suyos,
le rozo y mimo sensiblemente,
invento una infusión de verbo
logro un jadeo perfecto.
Quedándome por unos minutos
le confiero energía,
transpira…
Abre sus ojos
sonríe.
Me levanto, me aíslo.
No sé quién es,
el instante me inspira.
Tiempo después
aparece adherida a mi sombra
otra sombra que relajada
camina conmigo,
como un suave céfiro
creado para mi mente
un hermoso rocío,
apoderada ave blanca
dije en mi frente
fresco viento que despunta
en mi pensamiento,
relicario donde resguardo
mi libertad


CASCADA PRECIOSA

Medio señalado desde la eternidad
para guardar mi existencia.
Fuente natural virtuosa,
valioso recurso que renace mi alma
bebiendo de su caudal.
Estuve pensando en ti,
anhelante de que estuvieses conmigo
retozando entre las aguas del sendero,
atajo donde la cascada cae
rauda y modesta
desde el origen en su afluente.
Cascada preciosa iluminada
por rayos multicolores que,
bajo la sombra de los arboles se filtran.
Te pensé, te extrañé…
¿Sabes, las piedras hicieron
recordarte aun más?
Magnas, antiguas rocas inteligentes
que describen su labor prehistórica
excelsas donde mis pies se posaron,
saltando entre una y otra,
arcaicas como las hormigas trabajando
y aves exóticas en su medio ambiente
hábitat abundante en aire purificado,
antiquísimos bosques insignes
que saben a encanto,
perfección dotada milenaria
¡Oh, Cerro San Gil, sigue fluyendo
con la misma pasión,
encanto de Puerto Barrios!
Te pensé, te extrañe…
Y escuchando la cigarra,
también te recordé.


TITILANTES

En un inaccesible infinito,
hay asombrosa sinfonía
contemplación dócil y delicada
una imaginación clara y diáfana
que insondable divaga en la alborada.
Virtual diestro bregando en la batalla
distante aventura de su vientre
hábil al vencer en la embestida
con la entrega de su encanto en mi mente.
Voz febril como el ave en la montaña
cantar de alondra exquisitez afectuosa
es delicia en mi corazón apresado
como un broche atado a mi alma
como una lirica, una voz exaltada
risas, llantos, desvelos, ensueños.
En un lejano infinito
resplandecen como
estrellas
tus versos.

3 comentarios:

  1. ves, estoy aquí, el enlace que me enviaste le faltaba una letra, pero como soy una chica bond, jajajaa, encontré tus huellas. felicidades, Ro

    ResponderEliminar
  2. hum, estás con Manolete entre tus manos... un agrado que así sea, este compatriota se las trae, Segundo Antonio también se hace llamar, jajajaja

    tqm, Ro

    ResponderEliminar
  3. gracias Rocio Manuelito hace mucho me envio este libro de poesia y me encantó si algun dia lo ves dile que los recuerdo mucho, que todavia los quiero que eso nunca se termina el amor es asi, es amor toda la vida. Besos

    ResponderEliminar